Mi querido amigo... es vedad que no te conozco, desde la distancia puedo imaginar como eres, tu esencia y tu hermosura de infante.
Tus deseos más profundos y los que aun te faltan por desear... eres tan invisible para muchos, pero ¿Para mi?
Somos dos almas gemelas, los dos sabemos que es no tener nada...
¿Pobre? ¿Qué acaso no eres el ser más rico del mundo? Crecimos en dos mundos diferentes, lo sé, pero a pesar de eso, aun conservamos algo muy valioso: Nuestra flor de juventud.
Puede que sufras tanto como otras personas, que llores e incluso quieras salir huyendo de todo, pero tus risas, tus energías y pequeños ratos de alegría... ¿Quién te los quitará? Te quitarán a tus queridos padres, a tus amados hermanos... pero hay una cosa que no pueden quitarte.
No pueden terminar con tus sonrisas, no lograrían destruir nunca tu pequeño espacio de juegos, ni tus sueños, los cuales suelen ser tan hermosos cada noche.
Eres como las conchas del mar... esperado ser encontrado por alguien, ser amado y atesorado como el mismo coral de los arrecifes.
Con tu belleza lo eres todo para mi, así que... ¿A qué le llamas pobreza? Eres más feliz que los mismos príncipes, vuela como un pájaro! se libre y vive tu infancia!
No te preocupes por que comerás hoy o mañana, Dios te dará lo que necesitas.
Como la majestuosidad de las mariposas monarca vive cada día.
Querido amigo... si eres rico en belleza y alegría. ¿Qué mas pueden quitarte?
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