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martes, 24 de enero de 2012


Celluz Celeste Luz
BÉSAME PRONTO


Bésame pronto, que acabe la espera,
de esta desatada sed de amarte,
me devora la ansiedad por tu beso, me exaspera.
¡Mi corazón tiene tanto para darte!


Amo el esplendor de tu mirada
y el acento de tu voz de primavera.
Amo la sensación de tu mágica ensenada,
donde reposa la flor de mi azucena.


Necesito de tu canto transparente
para vivir en tu pecho divino
y emanciparte cuan si fueses niño,
con el espasmo de este amor urgente.


Tómame despacito entre tus brazos,
y envuélveme en esa magia, que es tu locura,
cobíjame en el calor de tu fuerte regazo
y sórbeme como néctar de dulce fruta madura.


CelesteLuz@Todos los derechos reservados 2012.

Alas de papel bello. Paseé por la ciudad buscándote en cada figura, sobrio, como una herida dura, que aún se lamenta… Te acaricié con mil poemas, de alegrías y de penas, pues no sé, amar, si no es con poesía. Así soy yo y no es cosa mía, me lo trajo el tiempo… Un beso, una caricia, una flor a destiempo, qué sé yo, sé, qué, sólo me quedó tu fotografía… Y ahora, cuando sople el viento frío del norte y los barquitos de papel zozobren en mares de lágrimas, navegaré con ellos, portando alas de papel bello… Y a nadie le importará ese destello que volará hacia las fraguas angélicas del mundo por venir… Qué sabes tú de mí y mi tristeza, deberías saber más del alma que reza, por ti, mil campos de agonía… Pronto iniciaré mi vuelta al místico paraíso y, lo haré sin ti, entre lluvias y gemidos sin alas de cera, con el alma tranquila y sosegada, soñando, siempre soñando, en tú penúltima mirada, como antaño… Te quedarás en mis cuentos y poemas, serás la musa etérea de las letras más bellas que jamás escribí y los hados y seres invisibles, te llevarán en su memoria de tronos enjoyados de gloria… Y besos de rubí… Quién sabe si no vine a este mundo, sólo, para conocerte a ti… Vida mía… Autor texto: Jorge Ofitas. Sevilla. 2012. ©.®.


Martha Lyda Marulanda Rodriguez
▒~▒~ ALTURAS.~▒~▒
▒~ Hoy entendi, que en la fiesta se bebe vino,
elimine la palabra "sacrificio" la remplase por la palabra Esfuerzo,
q' envegecer no es deteriorarse,
q' la noche no es el naufragio del amor,
aprendi no sentir humillacion
humillado fue Jesucristo por un ejercito de ignorantes
conozco a muchos ignorantes y yo no soy santa.
Aprendi que un amor que se aleja
solo esta dejando el espacio para uno mejor.
Aprendi que de mis cenizas de ayer
surgio la felicidad de mi presente.
Se que la sangre vertida de mi corazon
es la luz de mi alma.
Cuando alguien cree que me ofende
me esta regalando la nota para que le olvide.
Entendi q' partir, es solo buscar 
una ruta nueva de esperanza.
Agradecer a diario, poder comer, querer comer,
y tener que comer.
Que la harina mas seca, produce el mas tierno pan.
Aprendi que caer es solo un descanso para volverme a parar.
Que las heridas del alma son lineas
para escribir mejor nuestras esperiencias.
Que cuando derriban mi casa, ayudan a limpiar
la tierra para volver a edificar.
Que el huracan entre mas fuerte mas lejos
se lleva las nubes grises.
Que si los ojos se inundan, lavan rapido
las tormentas del alma y del corazon.
La palabra 'abismo' me indica donde debo detgener mi paso.
Que mi cuerpo fue creado para amar
no para ser mancillado ni maltratado.
Que en mi reinan y habitan tres personas:
una la que todos concen,
dos la que solo yo conozco,
tres la que nadie conoce, ni yo misma ¡ la impredecible !
Que todo es posible, dentro de lo factible.
Que Roma no se hizo en un dia
¡ pero se quemo en una noche!.▒~
♥ MARTHA LYDA MARULANDA RODRIGUEZ. ♥
La poeta irreverente.

Espera



Espera
Caminos que esperan ser caminados.
Secretos que esperan ser revelados.
Impíos que esperan ser perdonados.
Justos que esperan ser recompensados.
Cuerpos que esperan ser alimentados.
Seres que esperan ser iluminados.
Muertos que esperan ser resucitados.
Justicia que esperan los postergados.
Los caminos serán caminados.
Los secretos serán revelados.
Los impíos serán perdonados.
Los justos serán recompensados.
Los cuerpos serán alimentados.
Los seres serán iluminados.
Los muertos serán resucitados.
Pero…
No veréis a la justicia con ojos vendados,
ni veréis que no oye a los adinerados
y que es muda y no pide nada en los fallos dados.
Autora: Elgida Avila