Allì en la hora del letargo y de la espera
te me acerco sigilosa, casi cansada y adormecida,
tomando por sorpresa los tiempos sin esperas,
donde las tardes son melàncolicas, y algo austeras.
Estando cada uno en un compàs de espera
para entregarnos al placer y la lujuria lisonjera...
Atardeceres adormilados, algo cansinos,
bùsqueda profunda de sentimientos sin sentido,
de hechizos olvidados, por nosotros ya soñados.
Destellos de pasiones amodorradas,
somnolientas, un tanto ligeras...
Secuencias de momentos que no entiendo
que se entrelazan en todo su poderìo,
que no marca pena, ni sentido mucho menos
el olvido...
Orion Celeste D.R. 182469 Copyright
Pintura de Anatoly Dverin
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