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domingo, 19 de febrero de 2012


Raquel Norma Smerkin Roitman


No hago más que buscarme...


No hago más que buscarme, noche y día, día y noche, incansablemente trato de encontrarme fantaseando que en los pasillos de algún lugar de mi alma, me veré nítidamente entera, hecha una tigresa, para afrontar la vida, hecha espuma que rebalza la copa del destino, inventando sin ataduras, sin miedos, mi propio camino, apartando mi ser de las cosas que quitan mi brillo...
Búsqueda incansable que en el fondo sabe que algo de lo que espera encuentra, porque yo sé que se esconde ese felino, que puede soltar el temor al determinismo e inventarse un nuevo camino que la traiga de vuelta...
No hago más que buscarme y buscarme, sin cansancio, firmemente preparada para aquel momento de saber en que lugar estoy parada, y por qué tanto espíritu inquieto persiguiendo la certeza de dar por fin con mi verdadera esencia...
Me estoy esperando, por alguna curva del corazón, me estoy aguardando invisiblemente erecta, para sacar fuera todo lo que soy... 
Aunque aún no me encontré definitivamente, no existe el eterno siempre, porque a cada tramo del trayecto, construyo una nueva estrategia para dar con mi ser verdadero, con mi verdadera esencia...
No hago más que buscarme... pero ahora sin espacio ni tiempo, entendí que la vida es algo incalculable, y su devenir se termina, cuando muere el cuerpo...


Autora: Raquel Norma Smerkin Roitman
19.02.2012
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